Alejandro Soto

BARRIOS

El joven centrocampista es el recambio de Koke  en el Atlético tras el fichaje fallido de Hojberg.

UN TIMÓN PARA SIMEONE

Pablo Barrios adquiere galones. La última joya de la cantera del Atleti se está convirtiendo, poco a poco, en un jugador importante para Simeone.

El centrocampista madrileño debutó la temporada pasada y sorprendió gratamente a la hinchada colchonera. Este año es el de su confirmación.

Un asentamiento a marchas forzadas y, además, en una posición que no es la suya: la del mediocentro.

Pese a la insistencia de Simeone, el Atlético no fichó ningún ‘5’ este verano. Con la salida de Kondogbia, Koke quedaba como único mediocentro.

Los rojiblancos lo intentaron hasta el último día del mercado con Hojberg, pero la oferta por el danés no satisfizo las pretensiones del Tottenham.

Koke se quedó sin recambio y, para más inri, cayó lesionado en la primera jornada. En esa tesitura, el Cholo decidió retrasar a Barrios.

El técnico argentino cree que el futbolista madrileño reúne características que le pueden servir para jugar de ancla con solvencia.

Y lo cierto es que Barrios está rindiendo de forma notable. Su físico, su buena colocación y su facilidad para romper líneas a través del pase le avalan.

Pese a que, en los últimos años, ha jugado de interior o mediapunta, en sus inicios actuó como mediocentro. Por lo tanto, todo esto no es nuevo para él.

Barrios cayó de pie en el primer equipo del Atleti, puesto que fue quien aportó frescura en el peor momento de la temporada pasada para los del Cholo.

Tan sorprendente fue su irrupción que está entre los nominados al Golden Boy y ha alcanzado los 29 partidos como rojiblanco con tan sólo 20 años.

En el club confían plenamente en su talento. Por ello, ha sido renovado hasta el año 2028 con una cláusula de rescisión de 100 millones de euros.

Barrios es, en suma, un diamante que Simeone debe pulir. Y lo está haciendo, además, transformándole en la futura brújula del Metropolitano.