Louis, hijo del legendario Gianluigi Buffon, está siguiendo los pasos de su padre como futbolista… pero también los de su madre.

A sus 17 años ya ha debutado en segunda división, pero ni es portero ni va a representar a la selección italiana. O, al menos, no de momento.

La federación checa ha seleccionado en marzo al delantero para la sub18. Louis, hijo de la modelo checa Alena Šeredová, tiene doble nacionalidad.

Una convocatoria que Gianluigi ve con buenos ojos. Cree que, de haber ido con Italia, su hijo habría jugado con presión por el peso de su apellido.

Pavel Nedvěd, compañero de su padre en la Juventus, ha sido clave para que se decante, de momento, por los checos. Mientras no debute con la absoluta, podría cambiar por Italia.

Juega en el juvenil del Pisa, pero Filippo Inzaghi, entrenador del primer equipo, ya le ha hecho debutar con los mayores. Disputó los minutos finales en la derrota ante el Spezia.

Inzaghi, campeón del mundo y también ex compañero de su padre en el Parma, ya había remarcado su compromiso y su talento en febrero, cuando lo convocó por primera vez.

Juega como extremo izquierdo, aunque también puede actuar de punta. Acumula 6 goles con el juvenil del Pisa en lo que va de temporada.

Su altura, algo menor a la del padre, y su manejo de ambas piernas han convertido a Louis en objeto de disputa entre checos e italianos.

Curiosamente, su segundo nombre, Thomas, lo eligió Gianluigi en honor a Thomas N’Kono, portero camerunés del Espanyol en los años 80.

Gianluigi, que entonces jugaba de centrocampista, decidió hacerse portero cuando era un niño debido a su admiración por el camerunés.