El camino a los Juegos Olímpicos de París no ha sido sencillo para muchos atletas y Kevin Berlín, saltador mexicano, es un ejemplo.

Después de quedar en 4ª lugar en salto de plataforma 10m sincronizado en Tokio, se vio a inicios de 2023 sin recursos para continuar su carrera.

La retirada de las becas de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) de México a los atletas de natación le afectó de lleno. Su familia tiró de ingenio para salir adelante.

Para poder seguir compitiendo y costeando sus gastos, montaron su propia empresa cafetera bautizada como Olimpiada Café.

Con el eslogan “Un clavado al sabor veracruzano”, su región, la marca ha sido un éxito. En cuestión de días, ya recibían encargos de todo México.

No sólo ha podido competir en los Juegos, sino que además sus padres y su hermana han podido viajar para apoyarle desde la grada.

Ya en los Mundiales de natación de 2023, celebrados en Japón, consiguió el bronce junto a su compañero Randal Willars, a cinco puntos de la plata.

En París, sin embargo, ha tenido la misma suerte que en Tokio. Cuarta posición, sólo 3.48 puntos por detrás de Canadá, que se llevó el bronce.

Al conocer el resultado, no pudo evitar las lágrimas. “Dimos lo mejor en cada clavado, luchamos hasta el final. El último clavado fue muy bueno, pero lamentablemente no nos alcanzó”.

Todavía le queda una oportunidad de medalla. El 9 de agosto volverá a competir en salto de plataforma, esta vez en la modalidad individual.