Se suele decir que 'el amor siempre vuelve'. En el caso de De Bruyne, es él quien quiere volver al lugar donde dio el 'sí, quiero' a Michele, su mujer.

Su relación empezó por un 'me gusta' de Michele en un tweet de Kevin. Un amigo lo vio y le animó a contactarla. "No, es muy guapa, no responderá".

Ante su negativa, el amigo escribió un mensaje a Michele en nombre de Kevin, y llevan juntos desde aquel episodio en 2013. Incluso se casaron en el que podría ser su nuevo hogar. 

Y es que De Bruyne está muy cerca de firmar por el recién campeón de la Serie A, el Nápoles. Su presidente, De Laurentiis, da por hecho su fichaje.

"He hablado con su familia, creo que ya se han comprado una bonita casa aquí". Aun así, mantiene la cautela hasta que no esté todo firmado.

Hace unas semanas, Dries Mertens, leyenda belga del Nápoles, respondió con una sonrisa delatadora ante el rumor. Su firma podría estar al caer.

'Sky Sports' habla de un contrato de dos años y otro adicional. De Bruyne pasaría los exámenes médicos justo después de volver con su selección.

La llegada del belga supondría una bomba para el fútbol italiano. Conte pidió buenos fichajes como condición para renovar, y parece que los tendrá.

Ahora con De Bruyne, Conte puede retrasar unos metros la posición de McTominay, líder por sorpresa del medio campo napolitano este año.

El belga encaja en el 4-3-3 que viene usando Conte, pero también podría aprovechar su visión y organización desde más atrás, como hacía con Eriksen en el Inter campeón de 2021.