Sergio Giménez

LA 'MILI'

Son Woong-jung dirige la academia de la estrella coreana y utiliza métodos poco comunes.

DEL PADRE DE SON

Heung-min Son, estrella del Tottenham, está viviendo una situación complicada por su lesión... y por su padre, Son Woong-jung.

En marzo fue denunciado por pegar e insultar a alumnos de la academia de su hijo. Él se encarga de dirigirla.

Tanto él como Son Heung-yun, hermano del jugador del Tottenham, han sido multados con tres millones de wones, unos 2000 euros al cambio.

El padre de Son es conocido por haberle entrenado desde niño y ser muy estricto con él, algo que ha trasladado a la academia.

La escuela cuenta con unos 35 niños de entre siete y quince años. Nada más entrar les obligan a hacer todo con su pierna ‘mala’.

Si un niño no llega concentrado al entrenamiento, lo manda de vuelta a su casa ya que “no puede hacer nada con él”.

Se centran en formar a los niños en los aspectos tácticos más básicos para que los dominen, como pases, controles, cabecear o defender.

Y no les permiten tirar a puerta hasta que llegan a los quince años. Según Son Woong-jung, puede dañar los ligamentos y articulaciones de los jóvenes.

Además, les enseñan idiomas como inglés o alemán, y cuando cumplen los quince les comienzan a buscar equipos profesionales.

Son Woong-jung prefiere que jueguen en la Bundesliga, ya que, según él, así se acostumbran a jugar a temperaturas más bajas que en Corea.