Sergio Pérez

TER STEGEN

El portero del Barça encontró en el café su  gran pasión:  se ha convertido  en todo un experto del mundo barista

ES BARISTA

Tras siete meses de recuperación,  el dueño de la portería del Barcelona está de vuelta. Ter Stegen regresó  a los terrenos de juego.

Durante todos estos meses en los que Marc ha tenido que descansar, recuperar y fortalecer su rodilla,  hay algo que no le ha faltado: café.

El portero alemán es un amante del café. Para él, no es solo una bebida, sino también una experiencia, un ritual que marca el inicio de su día.

Desde hace años ha explorado  el mundo del café de especialidad, buscando los mejores granos y entrenando sus métodos preparativos.

Habitualmente se prepara tres cafés  al día. Uno nada más despertar.  Otro, al llegar a la Ciudad Deportiva. El último, al volver a casa.

Su pasión lo ha llevado a invertir  en una empresa centrada en café de alta calidad, en la que también están  los Gasol, David Villa y Falcao.

El café es una parte fundamental  de su vida diaria. Sin embargo,  desde hace unos meses también tiene otra gran pasión: el piano.

Ter Stegen ha empezado a dar clases de piano a raíz de su lesión. Con más tiempo libre, ha buscado encontrar una afición para desconectar.

“Me ayuda con la coordinación  y me relaja mucho”. Es la hora del día en la que el portero apaga el móvil  y se centra únicamente en él.

Además, se ha apuntado a las clases con su hijo. Están aprendiendo  a la vez y se pican el uno al otro:  “Voy a aprender más que tú”, le dice.