El desafortunado choque de Mbappé con el hombro de Danso, con el francés saliendo muy mal parado por su nariz rota, es una de las imágenes de la Euro.

Con la incógnita sobre cuándo podrá estar de vuelta en el césped, lo cierto es que Mbappé tuvo que toparse con el ‘más duro’ de los austriacos.

Actualmente asentado como titular  con su selección, Kevin Danso tenía  un sueño muy distinto al fútbol profesional cuando era pequeño.

En declaraciones a Der Standard, el defensor confesó que “quería ser un actor de acción”. Mide más (1,90m) que el también austriaco Arnold Schwarzenegger (1,88m).

Rápidamente desechó la idea de las artes escénicas por el deporte, pero no sólo jugó al fútbol, ya que también  lo compaginó un tiempo con el rugby.

Esto se debe a que buena parte de su infancia vivió con su familia en Inglaterra y allí probó el rugby. Al principio le costó. “No me gustaba  y tampoco lo entendía”, afirmó.

De hecho, pudo hacer carrera. “Unas cuantas escuelas me contactaron. Me ofrecieron becas y la mejor educación si jugaba al rugby para ellos”. Sin embargo, al final eligió el fútbol.

En 2014 se mudó a Alemania para jugar en la cantera del Augsburgo,  y en 2017 debutó con el primer equipo y con la selección austriaca.

Danso volvió a Inglaterra en una cesión  al Southampton en 2019 que no cuajó, y después acabó a préstamo en el Fortuna Düsseldorf, de la 2.Bundesliga.

Su gran salto vino de la mano del Lens, que le fichó en 2021. Se convirtió en titular indiscutible y entró en el equipo de la temporada de la Ligue 1 en 2023.

Ese mismo año estuvo cerca de ganarle la liga al PSG de Mbappé, pero no lo consiguió. Este lunes tuvieron su último encuentro, que el francés no olvidará.