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Jorge Cuesta
El HamKam II noruego jugó un partido de fútbol con una inteligencia artificial dirigiendo al equipo.
POR UNA
IA LOCA
HUNDIDOS
Se suele decir que las IA acabarán sustituyendo cualquier profesión en el futuro. La de entrenador de fútbol, por ahora, no parece peligrar.
Se suele decir que las IA acabarán sustituyendo cualquier profesión en el futuro. La de entrenador de fútbol, por ahora, no parece peligrar.
Se suele decir que las IA acabarán sustituyendo cualquier profesión en el futuro. La de entrenador de fútbol, por ahora, no parece peligrar.
El pasado enero, el filial del HamKam noruego quiso poner a prueba cómo sería jugar un partido con un ordenador al mando del equipo.
El pasado enero, el filial del HamKam noruego quiso poner a prueba cómo sería jugar un partido con un ordenador al mando del equipo.
El pasado enero, el filial del HamKam noruego quiso poner a prueba cómo sería jugar un partido con un ordenador al mando del equipo.
Los entrenamientos, alineaciones, formaciones… Todo corría a cargo de una IA que tomaba decisiones en base a 12 billones de parámetros.
Los entrenamientos, alineaciones, formaciones… Todo corría a cargo de una IA que tomaba decisiones en base a 12 billones de parámetros.
Los entrenamientos, alineaciones, formaciones… Todo corría a cargo de una IA que tomaba decisiones en base a 12 billones de parámetros.
Se organizaron de inicio contra el Nes SK en un 4-5-1, e incluso llegaron a hacer el primer gol de penalti. El experimento parecía ser efectivo.
De hecho, el lanzamiento del penalti se efectuó al lado izquierdo del portero por indicaciones del propio ordenador. Acertó de lleno.
Pero, a partir de ahí, todo se descontroló por completo. La IA puso en marcha tácticas macabras como ir todos a por el balón o defender los once en el área pequeña.
Pero, a partir de ahí, todo se descontroló por completo. La IA puso en marcha tácticas macabras como ir todos a por el balón o defender los once en el área pequeña.
Pero, a partir de ahí, todo se descontroló por completo. La IA puso en marcha tácticas macabras como ir todos a por el balón o defender los once en el área pequeña.
Los goles en contra se sucedían y las soluciones de la IA pasaban por poner al portero a efectuar los saques de banda… o jugar con una formación 1-0-9. La antítesis, todos al ataque.
Los goles en contra se sucedían y las soluciones de la IA pasaban por poner al portero a efectuar los saques de banda… o jugar con una formación 1-0-9. La antítesis, todos al ataque.
Los goles en contra se sucedían y las soluciones de la IA pasaban por poner al portero a efectuar los saques de banda… o jugar con una formación 1-0-9. La antítesis, todos al ataque.
Ni qué decir tiene que acabaron por perder 1-6. Su entrenador humano dijo haber visto, no obstante, ciertos aspectos tácticos interesantes.
El experimento fue parte de un acuerdo comercial entre HamKam y Eidsiva, una empresa innovadora en el sector energético y tecnológico.
Sirvió para demostrar que, como dijo la propia empresa tecnológica, el aspecto humano será siempre la parte más importante del deporte.